En Perú es casi una costumbre comprar un vehículo “0” kms., tomando en cuenta mucho más la parte estética y la configuración de equipamiento y se obvia o se deja de lado, el ciclo de vida o lo que durará su motor antes de realizar una reparación preliminar o una total.
Por esta razón la columna de hoy día tiene como título: ¿Cuántas veces se repara un motor? La reparación de motor va a depender de la forma como fue tratado desde el primer servicio sin considerar el primero que parte de los 1,000 kms., y que sirve para determinar algún ajuste de la carrocería o para verificar cosas simples como algún perno flojo o su equivalente.
El primer servicio preventivo para un vehículo de uso particular inicia a los 5,000/7,500/10,000 kms., dependiendo del lubricante usado en cada mantenimiento que deben llevarse a cabo regularmente dentro de ese intervalo de recorrido, que obviamente varía cuando permite percibir ingresos y se trabaja como taxi, en servicio público, turístico o actividad similar.
Cuando a los vehículos no se les renuevan los fluidos dentro de los parámetros sugeridos por los talleres de la marca o los cambios se llevan a cabo en recorridos más espaciados que los usados particularmente la probabilidad de reducir la vida útil del motor es muy alta debido a que es diferente recorrer 200 kms, en medio día con arranques y apagados continuos que hacer el mismo kilometraje en carretera por dos horas al viajar de Lima a Chincha por ejemplo.
También cuando se usan los vehículos en zonas de excesivo calor o frío, los fluidos como el aceite de motor, de la caja, dirección hidráulica, el líquido de frenos inclusive los líquidos refrigerantes o el de la batería cambian sus propiedades que al no ser sustituidos a tiempo llevarán a reducir la vida útil vehicular y obviamente ninguna marca por muy buena que sea resistirá a los embates del conductor, a la falta de cuidado o de protección que necesitan los motores y en consecuencia las reparaciones serán mucho más rápidas.
Según la experiencia de especialistas en el tema, los motores de vehículos antiguos resisten hasta seis veces como límite máximo de reparaciones por realizar, lo que representa cambiar anillos hasta la medida más grande que es 0.60 y que pueden soportar los cilindros. Llegando a ese tamaño estos necesitarán ser “encamisetados” con lo cual la rectificadora construirá nuevas bases cilíndricas que iniciarán de cero donde el número a poner camisetas dependerá de la cantidad de cilindros que tengan los motores.
Esta reparación total llevará a tener un motor en condiciones similares a uno nuevo, cuyo promedio de vida dependerá fundamentalmente de la forma y uso de la unidad vehicular, del cuidado y prevención que cada uno de los propietarios o conductores realicemos, ya que de nada servirá tener un motor que iniciará su nueva etapa si no se consideran las sugerencias del fabricante para recambiar o sustituir en el momento correcto sin excederse del recorrido o hasta que el motor empiece a sufrir las inclemencias de los maltratos o descuidos innecesarios.
Conservar en buen estado los motores vehiculares solo dependerá de nosotros, ya que al no cambiar a tiempo los fluidos, las fricciones internas socavarán las piezas que redundará en gastos no programados o por el simple descuido inclusive de no percatarnos si nuestros Carros Ok tienen la suficiente cantidad de líquido refrigerante que los enfríe adecuadamente.
Para no llevar al nivel de “sufrimiento” a los motores, es necesario programar los ingresos al taller del representante, importador, concesionario, multimarca o al mecánico de confianza que evitará costosas reparaciones o sustitución de uno nuevo cuyo precio en los talleres o concesionarios de las marcas serán como comprar otro auto semi nuevo, usado o bien usadito o un vehículo nuevo asiático de bajo costo.
En los links que les copio hay tres marcas automotrices japonesas cuyos motores tienen muy buenos ciclos de vida
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