COVID-19Salud

Se ha alcanzado un hito: más de 3.000 ventiladores producidos en Italia.

Un resultado notable para la cooperación entre el Comisionado Especial Arcuri, Siare y FCA

En solo tres meses, se ha superado el hito de la construcción de más de 3.000 ventiladores para la respuesta italiana a la emergencia de salud pública COVID-19. Este es un logro extraordinario para la cooperación entre el Departamento de Protección Civil, su Comisionado Especial para el brote de coronavirus Domenico Arcuri y Siare Engineering, con sede en Valsamoggia (cerca de Bolonia), la única compañía en Italia que produce estos dispositivos médicos eléctricos específicos. El proyecto fue dirigido por Giuseppe y Gianluca Preziosa de Siare; por los empleados italianos de Fiat Chrysler Automobiles bajo Luigi Galante, Jefe de Fabricación – Marcas Premium para la Región EMEA de FCA; por Ennio Meccia, Director de Ingeniería de Manufactura para la Región EMEA de FCA; y por Carlo Di Giacomo, director de la planta de Cento, cerca de Ferrara.

Antes de que estallara la pandemia, la producción mensual en Siare Engineering era de alrededor de 125 máquinas. Aprovechando los conocimientos de fabricación y gestión de la división de Ingeniería de Fabricación de la Región EMEA de la FCA, basada a su vez en los métodos WCM (World Class Manufacturing), el negocio fue reutilizado. Con la asistencia de todas las partes involucradas, la producción aumentó de 8 a 80 unidades por día, en parte gracias al cumplimiento de las solicitudes de ayuda en la planta.

Una fortaleza crucial en la nueva organización del trabajo fue la posibilidad de construir válvulas solenoides, el “corazón palpitante” de un ventilador, en la planta de FCA en Cento (cerca de Ferrara), una joya en la producción de motores de alto rendimiento para todos los mercados. sobre el mundo. Al mismo tiempo, se encontró una solución de tecnología óptima para adaptar la línea de producción en los laboratorios de Ingeniería Siare en Bolonia para las válvulas solenoides producidas por la planta de Cento.
Con el impulso de todas las partes involucradas en la operación, la construcción de las válvulas solenoides en Cento resultó en una reducción de al menos 30-50% en el tiempo que llevó producir un dispositivo terminado en la planta de Valsamoggia.

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