El radiador: Cómo parte del sistema de enfriamiento vehicular

La gran mayoría de conductores acostumbrados a subirse a su vehículo y arrancarlo para desplazarse a su centro laboral y/o para realizar sus labores cotidianas, solo se percatan si este tiene combustible, razón por la cual sólo consideran indispensable trasladarse al centro de abastecimiento y obvian cosas elementales como revisar el indicador de la temperatura de sus Carros Ok que los alertaría de un correcto o incorrecto funcionamiento del sistema de enfriamiento vehicular.
Si revisaran con detenimiento sus unidades vehiculares tal vez podrían anticiparse a alguna avería o anomalía que podría presentarse en el radiador como parte del componente del sistema de enfriamiento automotriz, el cual de trabajar inadecuadamente ocasionaría desperfectos de consideración con los consecuentes efectos de gastos de dinero innecesarios.
Cuando el radiador no enfría como debiera lleva a generar recalentamiento vehicular que además de reducir la vida útil de los vehículos causa estragos en los motores.
Es así como el sistema de enfriamiento vehicular se constituye en uno de los componentes más importantes y determinantes para alargar la vida útil de estos y ayuda a evitar cualquier desperfecto o avería de consideración que podría afectar al motor al ocurrir recalentamiento.

Si el vehículo llega a recalentar puede soplar válvulas y afectar la culata al punto que se la tenga que “cepillar” para corregir el desperfecto generado al haberse recalentado el motor por algo que se pudo evitar con una revisión simple, y que puede darse con solo mirar el tablero de instrumentos para detectar el indicador de temperatura similar a un termómetro y que de superar los 70 grados avanzando hacia los 90 desde ya nos indica la existencia de una posible falla.
Al detectarse un nivel alto de temperatura debemos revisar el sistema de refrigeración para determinar si los niveles de líquido refrigerante se encuentran dentro de la medida que se encuentra marcada en el depósito donde se almacena este de forma tal que podamos rellenarlo si este se encuentra debajo de la medida o en su defecto por el tiempo de uso y por haber perdido sus propiedades se deba eliminar el existente cambiándolo totalmente por uno nuevo con la finalidad que cumpla adecuadamente con la función de enfriar correctamente.
Por regla general el refrigerante de acuerdo con las características protectoras de cada marca se debe cambiar al haber recorrido unos 35 a 40 mil kms., aunque hay otros con mayor de duración acercándose a los 70 u 80 mil kms. y que tienen que ver con la calidad que ofrece cada producto.
Si al revisarlo se verifica que el líquido se encuentra por debajo de la medida tope que indica el depósito puede ocurrir que haya alguna fuga proveniente del radiador o fisura existente en las mangueras o en alguno de los componentes del sistema de refrigeración, en este caso es conveniente realizar una revisión completa para evitar complicaciones futuras.
En el caso de sufrir recalentamiento del motor mientras nos encontremos viajando y detectamos que la temperatura sube continuamente para acercarse y/o superar los 90 grados será necesario estacionarse en algún lugar seguro saliendo del área de circulación vehicular para ubicarnos en la zona auxiliar de la pista para inspeccionar la falla y corregirla cambiando el refrigerante en caso contemos con este líquido protector o en su defecto se puede rellenar usando cualquier agua mineral más no la del caño porque terminará a la larga afectando al motor por las impurezas que contiene esta agua de caño, pero si no es posible encontrarla entonces solo por emergencia se puede rellenar con agua para llegar a sus destinos donde se la debe eliminar inmediatamente.

Al levantar el capot, como medida de prevención recomiendo no retirar la tapa del radiador si observamos humo o vapor que sale dentro de él, de esta forma evitaremos afectarnos con la emanación de vapor que podría inclusive quemarnos el rostro, para retirar la tapa debemos hacer uso de una franela o trapo cualquiera y manteniendo la cara alejada de la zona del radiador.
Al retirar la tapa del radiador, el vehículo terminará por eliminar el sobrante o una parte del líquido refrigerante y en este caso debemos esperar a que se enfríe el motor para rellenarlo o cambiarlo en su totalidad.
Casi siempre en eventos similares el tiempo de enfriamiento del motor tarda entre 45 a 60 minutos dependiendo del modelo y marca del vehículo y según el uso que se le haya dado al vehículo pues si recién ocurrió este desperfecto o estando parado se genera esta anomalía el motor enfriará mucho más rápido.
Existe una gran mayoría de vehículos no necesariamente muy modernos o actuales que equipan un sensor que al detectar recalentamiento, automáticamente reaccionan y se activan apagando el motor para protegerlo frente a situaciones de recalentamiento.
Los espero la próxima semana