Viaje seguro llevando un remolque

Cuando se realizan viajes largos, muchos conductores recurren a los remolques ligeros para transportar todo lo necesario, incluso la propia casa en el caso de las grandes tiendas de camping que se ocultan en su propio remolque.
4 remolques B
No cabe duda de que son un excelente recurso, pero también es totalmente cierto que llevar un remolque fijado en la parte trasera del auto cambia por completo el comportamiento y la respuesta del vehículo.
Si ya lo decidió, tome nota de los condicionantes y precauciones antes de salir a la carretera:
El remolque y la ley: Un remolque ligero, de menos de 750 kg de peso máximo, no necesita sistema propio de frenos, pero para utilizarlo en carretera, debe tener instalado el enganche en el vehículo (popularmente conocido como “bola de remolque”).
Los remolques deben ser un modelo homologado y disponer de portamatrículas y luces de freno, posición e intermitentes, con la instalación precisa para su conexión al vehículo tractor. A la hora de comprarlo, debes asesorarte sobre la idoneidad del remolque y de tu propio vehículo, pues su potencia ha de ser suficiente para traccionar sin problemas con el exceso de carga que supone el remolque. En estos casos, contar con un vehículo diésel, ayuda.
Una vez enganchado el remolque siempre debes realizar una inspección del sistema de enganche, que deberá quedar perfectamente asegurado y con las conexiones de alumbrado bien acopladas y a pesar de que no es un vehículo a motor, los neumáticos deberán llevar las presiones correctas, no presentar signos de desgaste ni deformidades.
Antes de ponerse en marcha, verificar el correcto funcionamiento de las luces. Limpiarlas frecuentemente pues suelen ensuciarse bastante con las salpicaduras de la carretera. Repetir esta operación con la placa, no olvidar las sanciones si no es visible.
De otro largo, es muy importante el reparto del peso en el remolque para garantizar la estabilidad de marcha. Coloca los objetos más pesados en el centro del remolque y procura que la carga se reparta lo más abajo posible, para rebajar el centro de gravedad.
Recordar que el equipaje no debe moverse dentro del remolque. Utiliza cinchas fuertes y de calidad para fijar la carga y asegurar que va bien cubierta.
Para circular con un pequeño remolque detrás es necesario algo de costumbre. Con el paso de los km uno tiende a olvidarse que las dimensiones y la dinámica del vehículo que conduce han variado sustancialmente, con lo que eso supone a la hora de conducir y maniobrar. También el viento lateral influye mucho en la conducción con remolque, ante el que debes reducir siempre la velocidad.
No olvides tampoco esa mayor longitud y peso al adelantar, pues no dispondrás de la misma aceleración y necesitarás una mayor distancia para incorporarte al carril derecho tras el adelantamiento, clave en el caso de las carreteras secundarias. Tampoco podrás tomar las curvas a la misma velocidad que cuando no llevas el remolque. Es aconsejable anticipar los movimientos antes de iniciar los giros.
Si es la primera vez que utiliza un remolque ligero, lo mejor es que entrenes las maniobras antes de realizar un viaje. Lo primero es probar a realizar maniobras en parado, para acostumbrarte a que el remolque marcha atrás gira al contrario que el vehículo, por lo que debes mover el volante en dirección contraria a dónde quieres ir.