Muscle Cars (y camiones) se vuelven eléctricos
Nuevos trenes motrices, argumento de venta comprobado: los fabricantes de automóviles han vendido potencia y velocidad durante más de un siglo, y no se detendrán debido al cambio a la tecnología de propulsión eléctrica.
A pesar de todo lo que se dice acerca de los vehículos eléctricos “asequibles”, los fabricantes de automóviles están centrando la atención en una nueva generación de potentes máquinas de precio premium que aprovechan el par máximo casi instantáneo que pueden ofrecer los motores eléctricos y las grandes baterías.
Tesla y Elon Musk abrieron el camino con el Tesla Model S Plaid de 1000 caballos de fuerza. Ahora, la manía de los vehículos eléctricos se está extendiendo.
General Motors se jacta de que su GMC Hummer EV de 1,000 caballos de fuerza es “súper rápido” gracias a un modo de refuerzo de aceleración opcional “Watts to Freedom” (WTF… ¿entiendes?). Ford tiene una versión de alto rendimiento de su Mustang Mach-E. Se informa que una bandada de Corvettes eléctricos de alta potencia está en camino.
Hasta ahora, la expresión más pura del muscle car macho de la década de 1960 en forma eléctrica es el Dodge Charger Daytona. Es un auto de exhibición por ahora, pero los ejecutivos de Stellantis dicen que uno real está en camino.
Todo lo que queda es que GM desempolve el nombre Pontiac GTO.