Hace 160 años la empresa fue fundada por Adam Opel

Septiembre de 1862: la empresa comienza construyendo máquinas de coser
1868: Adam Opel se casa con su esposa Sophie y construye la primera fábrica
1886: producción de la primera bicicleta “made in Rüsselsheim”
1899: Opel comienza a fabricar automóviles
2022: Opel se convierte en una marca de movilidad eléctrica

Rüsselsheim. Opel celebra un aniversario muy especial en 2022. Hace 160 años, Adam Opel fundó la empresa que lleva su nombre en Rüsselsheim. Al hacerlo, dio a luz a lo que se convertiría en una empresa exitosa e internacionalmente activa en una amplia variedad de sectores. Opel comenzó con la producción de máquinas de coser en 1862, luego continuó su ascenso hasta convertirse en el mayor fabricante de bicicletas del mundo antes de convertirse en una marca de automóviles de renombre internacional. El hilo común que recorre todos los productos “made by Opel” desde el principio (innovación accesible al mayor número de personas posible) sigue siendo muy relevante hoy en día. Opel apuesta de lleno por la electrificación y ofrece a sus clientes una amplia gama de modelos con diferentes versiones electrificadas.

Cuando se fundó en 1862: comienzos difíciles

Hijo mayor del maestro cerrajero Philipp Wilhelm Opel, el futuro profesional de Adam parecía decidido: un día se haría cargo y continuaría con el negocio de su padre. Pero Adam tenía otros planes. Su gran sueño era ir a París. Después de estancias en Lieja, Bruselas y Londres, finalmente llegó al ansiado destino donde tomó la trascendental decisión de incursionar en el negocio de las máquinas de coser. A finales de agosto de 1862, el joven de 25 años regresa a Rüsselsheim, su ciudad natal, donde monta un modesto taller en casa de sus padres, en contra de los consejos de su padre, que no estaba realmente interesado en las máquinas de coser. Después de disfrutar de la vida en las grandes ciudades europeas, volver a su ciudad natal supuso un gran cambio para el joven compañero. Pero fue aquí, en el pueblo de Rüsselsheim, que entonces tenía una población de 2.000 habitantes, donde Adam sentaría las bases de Opel, un nombre que adquiriría un seguimiento internacional.

El montaje de la primera máquina de coser tomó meses. Una vez terminado, lo compró un sastre de Rüsselsheim. Hummel lo usó durante 40 años. Ya entonces, el lema era “Opel, fiabilidad”. En 1863, Adam Opel instaló una primera unidad de producción en el establo en desuso de un tío. Desde París, su hermano Georg le suministró a Adam acero, lanzaderas, agujas y máquinas de coser completas para revenderlas. Ese año, la empresa publicó su primer anuncio y Adam contrató a su primer empleado. Opel no solo fabricó máquinas de coser, también las distribuyó con gran éxito.

En los años siguientes, el comercio de máquinas de coser disfrutó de una fuerte expansión, lo que benefició el desarrollo de Opel. En 1868, Adam hizo construir una nueva fábrica con una sala de producción de dos pisos, una máquina de vapor y un edificio residencial con oficinas contiguas. Después de mudarse, 40 personas trabajaban para la joven empresa. El mismo año se casa con su esposa Sophie, quien se encarga no solo del mantenimiento sino también de la contabilidad de la empresa. Las cifras de producción aumentaron rápidamente, sobre todo porque Opel respondió a los deseos especiales de sus clientes y diseñó máquinas de coser especiales para necesidades específicas. En 1886, 18.000 máquinas salieron de la fábrica. La empresa se había convertido en uno de los mayores fabricantes de máquinas de coser de Alemania y exportaba a toda Europa.

1887: de las máquinas de coser a las bicicletas

En la década de 1880, la industrialización ofreció a la familia Opel nuevas oportunidades comerciales. Durante un viaje a París en 1884, Adam Opel descubrió el grand-bis (en la capital francesa la bicicleta ya era un medio de transporte habitual). El empresario decidió comprar una máquina de este tipo para estudiarla. Pasaron varios meses antes de que el primero de sus propios modelos saliera de la fábrica de Rüsselsheim en 1886. En el otoño de 1887, llegó una tarifa para formalizar el comienzo de una nueva era en la historia de la empresa.

Al igual que con las máquinas de coser, Opel tomó rápidamente la decisión de ofrecer lo mejor en tecnología para sus bicicletas. En 1888, el big-bi, que marcó el comienzo de la fabricación de bicicletas en Rüsselsheim, fue reemplazado por la bicicleta moderna con ruedas más pequeñas y transmisión por cadena. En 1890, Opel vendió 2.200 bicicletas. Los cinco hijos de Adam y Sophie fueron los mejores embajadores de la empresa, participando en numerosas carreras ciclistas y sobre todo, ganándolas: con más de 550 v