En Aston Martin el refrán “Si no está malo, no lo repares” lo tienen como gigantografía en la entrada a las oficinas de diseño, es la única razón posible para que año tras año, cada cambio de modelo (incluso generacional) los vehículos sean iguales, salvo por unos leves detalles no visibles a primera vista.
Tampoco es que me moleste, de hecho que bueno que no han destruído el aspecto de sus vehículos (ejemplo: Subaru) pero tampoco le haría mal algún cambio más notorio, aunque con el nuevo Vantage ya fue un paso adelante
Con el Rapide siguen la misma fórmula. En las fotos se ve al próximo Rapide 2013 casi sin camuflaje, donde se ve entre los cambios exteriores un parachoque rediseñado, con un spoiler integrado y una toma de aire más baja. En la parte de atrás lleva un spoiler levemente más grande.
Bajo el capot se espera que esté el mismo 6.0 V12 de 470 hp y 600 Nm de torque. Tambien existen los rumores de una versión Rapide S, con una potencia superior a los 500 hp.
