Automotrices preocupados por la crisis en Egipto

El delicado panorama político de Egipto ha tomado por
sorpresa a los fabricantes automotrices, siendo Toyota el
primero en detener operaciones comerciales en aquella nación africana debido a
las demostraciones en contra del Ex mandatario Mohamed Morsi. Representantes
del fabricante japonés declararon que las operaciones han sido reanudadas y que
ninguna de sus agencias concesionarias fue dañada durante los disturbios.

Según Toyota, las ventas no resultaron afectadas
y las actividades se realizaron de manera rutinaria en la planta Toyota CKD en
Cairo. Cabe recordar que Toyota construye la SUV Fortuner en esas
instalaciones, un modelo basado en la pickup Hillux. La planta emplea a 700
personas.

General Motors también posee una fábrica en Cairo, pero
el fabricante oriundo de Detroit no ofreció información respecto a las
consecuencias derivadas del conflicto en Egipto.

Renault, fabricante con 38 agencias en aquel país,
declaró no haber sido afectado por el levantamiento en armas. La compañía
francesa añadió que monitorea la situación «de cerca».

Las ventas de vehículo en Egipto durante los primeros
cuatro meses del año en curso habían aumentado 14%, a 68,106 unidades,
con Chevrolet como la marca más vendida (16,124 unidades),
seguido de Hyundai (10,510), Toyota (6,798), Kia (5,435) y Renault
(3,155).