El mantenimiento de un vehículo es esencial para garantizar su rendimiento, seguridad y durabilidad. Sin embargo, la elección del lugar donde realizar estos servicios, ya sea en el concesionario, en un taller multimarca o con un mecánico de confianza, es una decisión crucial que depende de múltiples factores, como el costo y la calidad del servicio, entre otros.
En el sector automotriz, la lealtad del cliente es fundamental. Sin embargo, en muchos concesionarios, esta relación se ve afectada por altos costos de mantenimiento y un enfoque poco centrado en el cliente. Esto ha llevado a que muchos propietarios opten por servicios alternativos, como talleres multimarca o mecánicos independientes, en busca de precios más accesibles y una atención más personalizada.
La realidad es que mantener a un cliente es mucho más sencillo que recuperarlo. Cuando los costos de los servicios superan las expectativas o la percepción de valor, los consumidores tienden a buscar alternativas. En América Latina, donde el presupuesto familiar es un factor determinante, esta situación es aún más evidente.
En los concesionarios, gran parte de los ingresos provienen de los servicios postventa, como los mantenimientos periódicos. Por ello, es crucial que los consumidores investiguen y comparen precios antes de tomar una decisión. Es recomendable consultar cuánto cuesta un servicio de mantenimiento según los kilómetros recorridos (5,000, 10,000, 20,000 km, etc.) y evaluar qué opción ofrece la mejor relación calidad-precio.
Independientemente del lugar elegido, hay piezas y componentes del vehículo que requieren un mantenimiento constante para garantizar su óptimo funcionamiento.
En Carros Ok te indicamos cuáles son:
Aceite de motor: Es esencial para la lubricación del motor y debe renovarse según el tipo de aceite utilizado: mineral (cada 5,000 km), semisintético (cada 7,500 km) o sintético (cada 10,000 km). Incluso si el vehículo no está en uso, el aceite pierde sus propiedades químicas.
Filtros: De aceite, combustible, aire y polen son elementos claves que necesitan reemplazo regular. El filtro de aceite, por ejemplo, evita que las impurezas dañen el motor.
Pastillas de freno: Aunque pueden durar hasta 60,000 km, se recomienda revisarlas a partir de los 20,000 km o cuando se detecten ruidos o pérdida de rendimiento en los frenos.
Anticongelante: Este líquido asegura que el motor mantenga una temperatura adecuada, evitando problemas en climas extremos.
Líquido de frenos: Fundamental para el sistema de frenado, debe sustituirse cada 30,000 a 40,000 km o cada dos años para garantizar su efectividad.
La decisión de realizar el mantenimiento en un concesionario, un taller multimarca o con un mecánico de confianza debe basarse en un análisis de costos, calidad del servicio y conveniencia. Para los propietarios de vehículos, investigar y comparar opciones es la mejor manera de asegurarse de recibir el mejor servicio al mejor precio, sin comprometer la seguridad ni la calidad.
Los esperamos en el siguiente post.
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¿Mecánico de confianza o concesionario?